El ministro de Economía, Axel Kicillof, celebró este jueves que las cerealeras se hayan comprometido a despachar la cosecha 2014 e inyectar unos 5.700 millones de dólares al país, y advirtió que los productores y las exportadoras perdieron un 25% de su recaudación por "especular", según publicó iProfesional.

El funcionario señaló que, tras alcanzar un acuerdo después de varias reuniones desde septiembre, les pidió a las empresas cerealeras que informen a través de los medios de prensa que van a despachar la soja para "terminar con las especulaciones" de "los agoreros que promueven devaluaciones".

Kicillof admitió en declaraciones a Radio Nacional que la retención de las cosecha de soja por parte de los siete grandes polos exportadores había generado preocupación en el seno del Gobierno, incluso tenía "conflictuada" a la presidenta Cristina Kirchner.

"Es un tema permanente para la economía argentina porque desde los principios de la historia la exportación agropecuaria jugó un papel muy importante (para la economía local), ahora estábamos en una situación muy paradógica que nos tenía en el ministerio de Economía y a la Presidenta de la Nación realmente perplejos y conflictuados", dijo el ministro.

Los productores alcanzaron este año una cosecha de 54 millones de toneladas de soja, un 15% más que en la campaña anterior, pero en connivencia con las empresas cerealeras mantienen retenida -y recién ahora despacharán- entre 24 y 27 millones de toneladas.

En enero se había registrado una situación similar que motivó reuniones con funcionarios nacionales, quienes les advirtieron que en todo 2014 iba a haber estabilidad cambiaria y que los precios internacionales del poroto iban registrar una tendencia bajista, por lo que les convenía vender.

"Cuando en enero tuvimos la charla les dijimos que iba haber estabilidad cambiaria por lo que iba a ser un error guardar la cosecha para especular, porque ademas veíamos una tendencia de caída en los precios internacionales. Pero especularon y perdieron los productores, perdimos todos los argentinos porque sobre eso se pagan retenciones", consideró Kicillof.

Indicó el ministro que todo el mundo mira las reservas internacionales del Banco Central de la República Argentina, pero todo el mundo sabe que en los campos, en los silos, hay entre 24 y 27 millones de toneladas que a u$s425 la tonelada son aproximadamente unos 10.000 millones de dólares.

En ese sentido, aclaró que si los propietarios de los granos deciden no vender "artificialmente se genera una especie de agujero" en el comercio, porque hay 10.000 millones de dólares que tendrían que estar en moneda local en las cuentas de quienes comercializan el poroto y las divisas en las reservas del Central.

"Se genera una especie de extorsión. Se entorpece el comercio exterior y la disponibilidad de divisas", sostuvo y advirtió que el precio actual de la tonelada de soja se ubica en los u$s425 pero los precios a futuro de abril están como en u$s360 la tonelada.

Por la baja en los precios internacionales que la soja registró en lo que va de 2014, consideró Kicillof que los productores y exportadores "perdieron el 25% de su riqueza de un saque".

"Yo lo entiendo al productor porque tal vez cuando los medios de prensa generan un bombardeo de clima de desastre inminente, la gente se asusta. Y les dicen que guardando les va a ir mejor pero claramente no es así", dijo Kicillof y concluyó al advertir que "si le va mal al Gobierno, le va mal a todo el país".