El nuevo contrato de dragado fue adjudicado a la empresa holandesa Jan de Nul N.V. y Caraffo expuso la previsibilidad que tendrá Puerto Quequén, donde no solamente mantendrá fuentes de trabajo sino que indirectamente beneficiará al resto de la ciudad y al hinterland portuario, según detalla un cable de noticias de la agencia NA.

Daniel Monjes, representante del Sindicato de trabajadores de Terminal Quequén, coincidió en que "esto trae tranquilidad a los trabajadores, habida cuenta que permitirá que el sector exportador realice contratos a largo plazo permitiendo que continúe un empleo genuino que beneficiará a los gremios portuarios y también al resto de la clase trabajadora".

Caraffo, aclaró que en el dragado "se va a extraer hasta tres millones de metros cúbicos en tres años, respondiendo a seis campañas de succión y doce campañas de una draga de inyección".

A su vez manifestó que las tareas "van a garantizar, durante tres años, 45 pies de calado a Puerto Quequén y una muy buena cantidad de extracción de sedimentación, que desde hace mucho tiempo no tenemos. Además le va a dar a los operadores portuarios la previsibilidad que necesitamos para que se puedan permitir buques, sabiendo que no habrá inconvenientes de ningún tipo con el tema del dragado", señaló.

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