Logo

23/08/16 | Noticias

El signo menos

Image Cuando estamos transitando la parte final del octavo mes del año, con un segundo semestre que se va consumiendo lentamente, todos los índices sobre la actividad económica que se van conociendo -aunque en algunos casos correspondan a la primera mitad del año- siguen siendo negativos, es decir, con el signo menos que los antecede. En el caso que hoy nos ocupa, corresponden a dos rubros realmente significativos dentro del acontecer general de la economía, como lo son la producción automotriz y la actividad petrolera.
En el caso de los automotores, la producción registró una nueva caída de 13,3% en el pasado mes de julio con solamente 37.706 unidades fabricadas en las plantas del país, razón por la cual las entregas a las concesionarias se contrajeron 2,4%, mientras que las exportaciones a Brasil, país que continúa sumido en una crisis que nos afecta directamente por la gran dependencia de nuestro comercio exterior con el vecino del Mercosur, tuvieron un derrumbe realmente espectacular de 38,3%. Destaca además la Asociación de Fábricas Automotores que las ventas al exterior se redujeron 10,6% con relación a junio, y que en los primeros 7 meses del año las terminales enviaron al mercado externo 101.572 unidades, nada menos que un 31,9% menos que en ese mismo lapso de 2015.
En cuanto a las ventas mayoristas, se entregaron a la red 52.678 vehículos, volumen que fue 16,6% más bajo que el mes de junio y 2,4% comparado con julio del año pasado. Las 37.706 unidades que se fabricaron en el séptimo mes del año significaron una baja de 9,5% respecto a junio y 13,3% por debajo en la comparación interanual.
Si se analiza todo el período de enero a julio, las terminales tuvieron un producción total de 261.744 vehículos, el 13,9% menos que en 2015, cuando habían salido de las fábricas 303.903 unidades.
Como puede advertirse, con esta sucesión de números estadísticos, todos están en descenso, bien podría decirse que en sintonía con el resto de los indicadores económicos. Enrique Alemany, de Ford Argentina, quien en reiteradas ocasiones estuvo de visita en Rafaela por sus contactos con la concesionaria Long Automotores, en su carácter de presidente de ADEFA, sostuvo que esa entidad "monitorea en forma permanente la dinámica situación con Brasil", pues "este comportamiento continúa posicionándose como el principal desafío en materia de comercio exterior, el cual, de revertir esa situación, ayudaría a impulsar la producción y exportación desde la Argentina".
Otro sector en retroceso es el relacionado con la exploración de nuevos pozos petrolíferos, lo cual pinta una perspectiva futura muy poco optimista en cuanto a la posibilidad cercana de comenzar a revertir el fuerte déficit productivo que ha llevado al país a una fuerte dependencia del exterior, luego de haber alcanzado la condición de autoabastecimiento, manteniéndose hasta pocos años atrás.
El informe de los primeros 5 meses del año en la zona de las provincias de Chubut y Santa Cruz, más precisamente en el Golfo San Jorge, da cuenta de una caída de perforación del 37,6%, concretamente se trata de 94 pozos menos comparado con igual período de 2015.
Los datos son oficiales, proporcionados por el propio Ministerio de Energía, que de tal modo ve escapar uno de sus principales objetivos como es ir remontando la producción de crudo, que en lugar de eso irá decreciendo, pues así lo establecen estas condiciones de retroceso en la perforación, un aspecto clave en la producción, por algo tan simple como que sin nuevos pozos es imposible que crezca la extracción de petróleo. Expresado de esa manera, con total simplicidad, para que sea comprendido.
La zona más afectada por esta caída fue la cuenca de Chubut, donde el año pasado entre enero y mayo se habían perforado 136 nuevos pozos y este año en ese período apenas fueron 74, en tanto que en Santa Cruz el retroceso fue de 114 antes y 91 ahora. Si se toma que la exploración de cada nuevo pozo tiene un costo de dos millones de dólares, el descenso en las inversiones en tal sentido ascendieron a 170 millones de la divisa estadounidense.
El panorama, sumado al conjunto, es bastante desalentador.

Image Image Image Image